Entender el barniz
Qué es, cómo se produce y por qué es un problema
Barniz es un término de amplio alcance que abarca diferentes tipos de depósitos en sistemas de aceite. Algunos tipos son duros y tenaces, otros pegajosos y otros suaves y espesos, comúnmente conocidos como lodos. Lo que tienen en común es que generalmente se originan a partir de la descomposición o degradación del aceite en el sistema. El barniz por lo general se forma y se pega en áreas que son muy calientes o frías y estancadas.
La acumulación de barniz por la degradación del aceite puede causar graves problemas en turbinas industriales, sistemas hidráulicos y compresores. El tiempo de improductividad, los costos de reparación o reemplazo pueden llegar a costar millones. Afortunadamente, hay pasos que puede seguir para reducir el riesgo de formación de barniz y mitigar su impacto cuando se presenta. Ante todo, es útil entender qué es, qué lo causa y los efectos que puede ocasionar en el equipo.
Medir o detectar el barniz es un reto. Todos los operadores de equipo deben tener un programa de análisis de aceite para verificar si hay contaminantes en el mismo. Sin embargo, el análisis de aceite solo mide los precursores del barniz. La prueba de MPC (Colorimetría de Parche de Membrana) es un indicador de que el aceite se puede estar descomponiendo, una medida del potencial del barniz pero no del barniz en sí. El barniz no aparece en el aceite, sino en las superficies metálicas con las que entra en contacto el aceite. La única forma de saber que tiene barniz es observarlo sobre una superficie o experimentar su efecto. Por
ejemplo, una válvula pegajosa es un indicador de la probabilidad de la presencia de barniz.
El barniz se activa de diferentes maneras. En general, el ciclo del barniz comienza con algo que altera la estabilidad del lubricante, generalmente un evento térmico como el calor excesivo. Esto hace que el aceite se comience a degradar y que se
empiecen a formar impurezas. Durante mucho tiempo, estas impurezas permanecen disueltas en el aceite y no causan ningún daño. Sin embargo, a medida que se acumulan más y más, comienzan a pegarse entre sí, formando partículas submicrométricas, suspendidas, insolubles. Finalmente, estas partículas se polarizan o se atraen eléctricamente a las superficies metálicas. Cuando se comienzan a adherir a estas superficies, se convierten en barniz.
La contaminación cruzada de aceites con aditivos incompatibles también puede disparar el ciclo del barniz. Si un operador introduce un aceite nuevo con una formulación de aditivo diferente a la del aceite existente, los aditivos pueden reaccionar
entre sí, lo que altera el lubricante y comienza el proceso de degradación que finalmente conduce a la generación de barniz.
El barniz es un tema complejo y esta breve descripción apenas araña la superficie. Por lo menos le ayudará a entender las causas principales (calor extremo y contaminación del aceite) y el posible impacto en su equipo. Entonces, ¿qué puede hacer para reducir el riesgo de sufrir daños costosos? Abordaremos este tema en nuestro próximo artículo.
03/04/2020